Para una institución educativa, sea pública o privada, siempre será de gran utilidad contar con su propia página web. Lamentablemente, a pesar de contar con una página muchas escuelas terminan por desaprovechar gran parte del potencial de esta herramienta de comunicación.
Las fallas más comunes que pueden ser detectadas fácilmente en las páginas web de educación son normalmente dos:
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Tener una página sin actualizar. Es muy común que se contrate a una empresa o a un freelance para realizar la página, pero no darle mantenimiento. ¿Las consecuencias? Contar con información desactualizada, en la que podemos encontrarnos con cursos o carreras que ya no se imparten, nombres de personas que y no laboran en la institución, etc.
- Información mal estructurada. Algunos sitios si tienen la página más o menos al día, pero para los visitantes es difícil encontrar lo que busca, porque el camino para llegar a ella no está tan claro como debiera.
4 características que pueden convertir a las sitios web de educación en unas bastante funcionales:
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Tener la página siempre actualizada. Con calendario de actividades a realizar, los cursos que se imparten, información sobre el personal, costos, etc. Todo debe estar siempre al día.
- Una correcta distribución de la información. Cualquier persona que visite el sitio, debe poder encontrar lo que está buscando, y esa responsabilidad radica en gran media en una correcta estructuración del sitio.
- Atender a los distintos “públicos”. Se debe ser consciente de que a la página llegarán básicamente tres tipos de personas: quienes desean conocer la institución, para en un futuro inscribirse ellos mismos o a sus hijos; quienes ya están inscritos, y desean consultar una fecha del calendario escolar o algún otro material; y quienes ya son egresados, y desean ver si se ofrece algún tipo de seguimiento. La página debe funcionar para estos tres públicos.
- Aprovecharla como entorno de trabajo. Hablando de quienes actualmente laboran en la escuela (principalmente, alumnos y maestros), la página debería contar con una plataforma donde compartir material de aprendizaje, entregar tareas, realizar exámenes, etc.
Como podemos ver, no se trata de “crear la página y ya”. Todo sitio de internet necesita mantenimiento y constante actualización, y las páginas web de educación no son la excepción.